(Continuacion.)
En este dia no pude verificar lo que habia proyectado, por lo que mandé á mi ayudante en consorcio del baqueano y de un peon, para que explorasen aquel campo, y me avisaran, si en la Cañada del Salado habia agua, para poder tirar á los Médanos de los Perros del Cerro de Varela.
J. SOURRYERE DE SOUILLAC.